Con el auge de los servicios financieros y de la facilidad de acceso a los mismos, es normal que algunas personas tengan inconvenientes al momento de responder por sus deudas. Las circunstancias pueden variar según cada caso. De todas maneras, como cliente debes estar informado para saber qué hacer cuando se presente algún tipo de problema con tu entidad financiera.
Órgano de control
Para la legislación colombiana, la defensa de los consumidores es importante debido a la vulnerabilidad de los mismos ante el mercado. Por eso, el ejecutivo dispone de un regulador para los bancos y las demás compañías a fines al sector: la Superintendencia Financiera de Colombia (SFC). Su función principal es la de velar por el buen funcionamiento de la industria, fomentando el uso de prácticas leales y sana competencia.
Por consiguiente, la SFC es la protectora de los usuarios y se vale de una política que estimula a las compañías a tener una oficina para el Defensor del Consumidor Financiero (DCF). Así pues, cuando accedas a algún producto, asegúrate de conocer sobre el DCF de tu entidad, su ubicación, las personas a cargo, sus medios de comunicación y los servicios prestados en caso de un infortunio.
Entidades reguladas
Lo primero que debes entender como usuario es que hay que evitar adquirir productos con compañías que no estén reguladas por la SFC. No hay que olvidar que las transacciones fraudulentas son recurrentes y en caso de mal manejo del servicio o estafa, en ningún lado te van a responder. Por eso, hay que informarse antes de tomar cualquier decisión.
Entre tanto, las firmas amparadas por la ley cuentan con el DCF para la resolución de controversias con sus clientes. Cada una establece su "modus operandi", pero todas deben funcionar para atender quejas y reclamos, servir como voceras del consumidor ante la entidad, hacer recomendaciones sobre el manejo de productos y servicios y proponer modificaciones a las normas para mejorar los derechos de los usuarios.
Los inconvenientes más frecuentes
Según el portal web Finanzas Personales, la SFC -a través de los DCF- reportó en el primer trimestre del año 2018 cerca de 373 mil reclamos por parte de los usuarios; la mayoría contra los bancos. Asimismo, evidenció que las quejas más frecuentes estuvieron relacionadas con créditos de consumo, tarjetas de crédito y cuentas de ahorro.
Sin embargo, las solicitudes trascienden más allá de los anteriores, demostrando grandes desacuerdos con respecto a la mala atención al cliente, cobros exagerados de comisiones, modificaciones de contrato, poca información en la vinculación, etc.
Con lo anterior, si tienes alguno de estos reclamos o cualquier otro problema con tu entidad financiera, recuerda que cuentas con su respectivo DCF, donde puedes acudir para resolver tu inconveniente.
No estás solo ante los inconvenientes con tu entidad financiera # TFinancio